Como ya vimos en anteriores post, el embarazo lleva consigo cambios a nivel hormonal y físico. Estos cambios pueden ocasionar algunas molestias o dolores.
Hinchazón y sensibilidad en los pechos
La molestia más notoria durante el embarazo es la hinchazón y sensibilidad en los pechos.
Desde los primeros días de embarazo, los senos empiezan a prepararse para la lactancia. Los elevados niveles de progesterona y estrógenos hacen que crezcan y se vuelvan más sensibles, tanto que en ocasiones duelen al más mínimo roce de la ropa.
Pasado el primer trimestre esa hipersensibilidad suele remitir, aunque puede que no siempre, mientras que durante el segundo y tercer trimestre los pechos siguen creciendo y acumulando grasa.
Ligero dolor o pinchazos en la zona del bajo vientre:
Puedes notar ligeros pinchazos a los pocos días de quedarte embarazada en la zona de los ovarios, aunque no todas las mujeres los tienen. Pueden aparecer estos pinchazos que suelen ser rápidos en aparecer y desaparecer. Se deben al estiramiento de los ligamentos que sujetan el útero que está creciendo. A partir del segundo trimestre son más frecuentes.
Si notas un dolor intenso o hubiera algún sangrado durante el embarazo es conveniente acudir a urgencias.
Dolor de cabeza
Durante el embarazo hay ciertos cambios que pueden favorecer la aparición de dolor de cabeza:
Los cambios hormonales
Los cambios en la tensión sanguínea.
Además durante el embarazo es más frecuente la sensación de cansancio generalizado y las ganas de dormir a todas horas que también puede facilitar el dolor de cabeza.
El hambre
Las preocupaciones, el estrés
Cambios metabólicos
Un ligero enfriamiento
Es aconsejable llevar un registro de los dolores de cabeza si estos son frecuentes para ver qué los puede desencadenar.
Dolores en las articulaciones y en los músculos
Los cambios hormonales y de peso durante la gestación conducen a mayor sobrecarga tanto en los músculos como en los huesos, sobre todo la pelvis, las caderas y los tobillos. Aunque en general el cuerpo trata de adaptarse paulatinamente a estos cambios, hay una distribución distinta del peso corporal y esto puede hacer surgir dolores articulares y musculares, principalmente por las noches.
Es el caso de los dolores en las piernas o pies causados por la inactividad, estar muchas horas sentada puede favorecer este tipo de dolores.
Dolor de espalda
Es una de las molestias más frecuentes. Generalmente es causado por los cambios en la columna vertebral que producen los músculos de la espalda, así como la relajación de las articulaciones de la pelvis. Todo ello influido por el aumento del tamaño del útero.
Salivación excesiva
Otra molestia que hace aparición en el comienzo del embarazo es la salivación excesiva o hipersalivación, tal vez una de las molestias menos conocidas del embarazo.
Está ocasionada por los cambios hormonales de las primeras semanas que provocan alteraciones en la boca. Está asociada con las cheap viagra free shipping náuseas, ya que tragar el exceso de saliva contribuye a esa sensación de malestar o puede que se produzca precisamente al sentir náuseas.
Todas estas molestias pueden reducirse con un buen cuidado corporal: alimentación sana, ejercicio moderado y un correcto descanso, evitando pasar largas horas de pie.